“El apoyo emocional es fundamental para asumir la enfermedad”

La de Sara es una historia de rebeldía ante la enfermedad, de negación ante la dureza de un problema de salud en una etapa demasiado temprana de la vida, de escasa atención a las señales que desde adolescente sus riñones le mandaban, en buena medida por la falta de información y la ausencia de antecedentes familiares. Un día, con 35 años, los análisis médicos revelaron que ya solo tenía un 25% de función renal. Un año después estaba en diálisis. Ahora a sus 45 años, Sara ya ha recibido dos trasplantes. El segundo fue en noviembre del año 2022 y el donante fue su pareja Iñaki.

Sara insiste mucho en que el apoyo emocional es clave para lidiar con el enfado ante una situación inesperada que te cambia la vida… en lo mejor de la vida. También da fe de la importancia que puede llegar a tener una buena relación con el especialista, en su caso la doctora Lola Arenas:

El segundo trasplante ha cambiado muy para bien la vida actual de Sara.

“Hay que informarse bien cuando te haces donante pero también vivirlo con normalidad”

Iñaki quería ayudar a su pareja, pero tenía muchas dudas sobre lo que implicaba esta decisión. Visto ahora con perspectiva, cree que la información y el apoyo psicológico son esenciales, al menos lo fueron para él.

Iñaki pasó alrededor de tres meses en recuperación tras la intervención. Luego pudo retomar tu rutina habitual de trabajo y actividades y su afición al deporte. Ha pasado más de un año y ahora es más consciente de nunca de la independencia que trae consigo un trasplante y cómo ese impacto positivo redunda tanto en la persona trasplantada como en su entorno más cercano.